Somos frágiles, nos rompemos.
Efímeros, finitos.
Segundo a segundo se nos pasa la vida,
se nos escapa el pasado y nos atormenta el presente
amenzando con el mañana.
¡Ah, el mañana!
Tan incierto punto en el tiempo...
Y uno se empeña en que mañana, tal vez la semana que viene.
Desacreditando la certeza del presente,
la maravilla del aquí y ahora.
¿Estás conmigo ayer?
¿Acaso estás conmigo mañana?
Por el momento estás conmigo ahora, aprovechalo
Es de las pocas cosas que tenemos certeza en éste mundo.
Del ahora.
De que nacemos y morimos.
que estamos ACÁ ahora, leyendo ésto, escribiendo ésto.
Aprovechémoslo ahora.
Amémonos.
Mañana, no sabemos.
